Una máquina que ordeñe correctamente es la herramienta más importante para el ganadero, ya que es el equipo que más se utiliza en la granja y, además, el responsable de generar la mayor parte de los beneficios para el ganadero.

Sin embargo, es importante recordar que para mantenerla en una buena condición de funcionamiento debe estar sujeta a un mantenimiento y cuidados regulares. El vacío debe estar bien configurado.

Las pezoneras deben cambiarse regularmente. Los revestimientos de goma también deben sustituirse cada 2500 ordeños, ya que la goma, con el tiempo, va perdiendo su elasticidad y acaba ejerciendo más tensión en el pezón. Por otro lado, la falta de elasticidad hará que el interior adquiera una forma ovalada en lugar de redonda, lo que disminuye la eficiencia del ordeño.

Los revestimientos de goma, además, se vuelven porosos con el tiempo, promoviendo la presencia de bacterias. Los tubos y revestimientos dañados o deteriorados deben reemplazarse de inmediato, porque, de lo contrario, se favorecería la transferencia de bacterias de una vaca a la siguiente. El reemplazo oportuno de las pezoneras es una forma de prevención de la mastitis.

Después de 3.000 ordeños, la calidad del material deja de ser la apropiada. Para una granja pequeña con 50 vacas que se ordeñan dos veces al día con 10 colectores, implicaría reemplazar las pezoneras cada 8 meses.

Se debe tener en cuenta que las pezoneras de silicona duran el doble, aproximadamente 6.000 ordeños. Sin embargo, son más caras y pueden deteriorarse de forma repentina.

Así mismo, una vez al año se debe garantizar que un técnico experto revise cada una de las ordeñadoras, a fin de que se someta cada máquina a una evaluación de ordeño estático o «en seco». Por otro lado, las evaluaciones de ordeño «húmedo» o dinámico analizarán el proceso de ordeño en su conjunto.

-Cómo puntuar los extremos de los pezones y qué significan las lesiones
-Cómo, cuándo y por qué realizar un ordeño dinámico o ‘húmedo’

La sala de ordeño

La sala de ordeño ser un espacio limpio, tranquilo y agradable, tanto para las vacas como para los ordeñadores. El área debe estar bien iluminada, bien ventilada y bien organizada. Todo el material necesario debe quedar al alcance de la mano:

-Las herramientas para el marcado de las vacas (como rotuladores, vendas de velcro, cinta adhesiva de colores)
-Material para tomar muestras de leche => Tomar una muestra de leche correctamente
-Toallas desechables de papel o una gran cantidad de toallas de tela
-Un termómetro
-Guantes de ordeño
-Agua corriente caliente (85°C) y fría
-Pizarra y rotulador para registrar las vacas que requieren atención, dejar notas para otros ordeñadores

Qué hacer cuando el ordeño se complica

El colector y las pezoneras deben mantenerse impecables y manipularse con cuidado para que no recojan suciedad del suelo.

Después de cada ordeño, todos los colectores deben limpiarse y revisarse en busca de roturas y desgaste. La sala de ordeño debe quedar impecable y todas las existencias deben reponerse (toallas, desinfectante, tubos de muestra).

Los tres pilares para un ordeño adecuado son:
-Comodidad y limpieza para las vacas
-Buenas rutinas de ordeño
-equipo de ordeño en perfecto estado de funcionamiento